domingo, 17 de abril de 2011

Indignémonos, impliquémonos

Leí hace tiempo un escrito de Antonio Gala que me hizo pensar mucho. Contaba el origen de la crisis actual con un breve e ilustrativo cuento: Érase una vez una mansión dirigida por la Señora Cultura y todo estaba en orden, pero he aquí que las empleadas; llamadas Política y Economía, se aliaron entre ellas y decidieron echar a la Señora dándole una patada, así se adueñaron de la vivienda quienes no estaban capacitadas para ello puesto que su función es servir a la Cultura y a los individuos y no ser servida por ellos.

Creo que esta historia es altamente descriptiva de lo que estamos viviendo actualmente, cada vez se oculta menos que quien nos gobierna realmente son los bancos y políticos, que no miran el fin social ni el beneficio común sino el puro y absoluto interés, si algo no da dinero no sirve y no se invierte en ello, así de simple. Está el fin comercial por encima del bien social y se supone que vivimos en una democracia (que en sentido amplio, es una forma de convivencia social en la que los miembros son libres e iguales y las relaciones sociales se establecen de acuerdo a mecanismos contractuales). Están surgiendo libritos como “Indignaos” o “Delito de Silencio” y en Internet hay muchas páginas y movimientos silenciosos, pero que cada vez se dejan oír más. Si acaso hay un medio muy útil para intercambiar libremente nuestras opiniones es éste y hay que aprovecharlo porque sino esto irá cada vez a peor y hay que intentar pararlo pacíficamente. No hay que perder la esperanza de que aún estamos a tiempo.

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