Perros y gatos

Paco:-¿Me puedes decir por qué has cambiado tanto en este último año?
Laura:-En mi caso era muy necesario.
Paco:-Se te veía feliz, alegre. Ahora, no tanto…
Laura:-Pero estaba viviendo la vida de otras personas olvidándome por completo de mí.
Paco:-Si eras feliz así ¿Por qué cambiar?
Laura:-Porque eso no está nada bien. Me comportaba como un perrito faldero fiel hasta extremos descomunales y siempre pendiente de agradar.
Paco:-Que malo eso de ser perrito, mucho más listos los gatos que no se entregan del todo jamás y van a su bola, sólo se dejan acariciar cuando les apetece y tienen muy delimitado su territorio.
Laura:-Pero la forma de ser nace con uno…Yo también quisiera ser un gato, pero, no lo soy. Ser perro también es muy cómodo, si lo miras bien, que fácil es que otros piensen por ti y no hacerte responsable ni tomar decisiones, en cambio el gato para bien o para mal piensa por sí mismo.
Paco:-Me dan pena los perros que se quedan incluso en la tumba ahí lloriqueando cuando muere su amo, es tanta su fidelidad…. Por cierto que el otro día vi Toy Story 3, me encantó y de alguna forma la moraleja de la peli tiene relación con esto que estás contando, los muñecos serían como el perro y se dan cuenta de que el niño se ha hecho mayor y entonces acaban comprendiendo que no se tienen que quedar encerrados en un desván sino dejar que otros niños jueguen con ellos, tienen que ser generosos con los demás y con ellos mismos.
Laura:-La he visto, como me gustó. Yo entendí algo parecido, por eso nunca olvides tener tus propias aficiones, tu mundo interior, tu espacio, donde nadie pueda llegar, eso nunca lo regales, aunque sea un poquito, es por tu propio bien, para que te quede algo donde asirte si hay un “naufragio”. Porque el que ama lo hace para siempre pero hay que quererse a uno mismo, por Dios.
Paco:-Los perros ojalá pudieran aprender también esto, quien sabe, quizás con paciencia se lo logro hacer entender a mi “Rostri”, no vaya a ser que me pase algo…Me has puesto nervioso Laura, no se me había ocurrido pensarlo.
Laura:-Joer, tú sí que eres optimista, chaval. Ya me dirás si se lo consigues explicar al “Rostri”. En fin…