jueves, 29 de septiembre de 2011

Derechos asertivos

La asertividad es una cualidad que deberíamos practicar todos los seres humanos, ya que ser asertivo es: Actuar y decir lo que pensamos de forma abierta y sin temor, con franqueza y sinceridad, ni ser pasivo ni agresivo al comunicarnos, sino hablar y escuchar con respeto, no queriendo imponerse en el diálogo ni dejando que la otra persona se imponga, es el justo punto medio propio de relaciones sociales sanas y positivas.

La asertividad parte de la idea de que todo ser humano tiene ciertos derechos que jamás deberíamos olvidar, que a veces por miedo, culpa o desconocimiento no ejercemos y que yo al menos pienso imprimirlos y ponerlos en la cabecera de mi cama, para que luego nadie me venga mareando con milongas y queriendo venderme la moto. Las ideas siempre claras. Estos derechos básicos que todos tenemos son:
1. Derecho a ser tratado con respeto y dignidad.
2. En ocasiones, derecho a ser el primero.
3. Derecho a equivocarse y a hacerse responsable de sus propios errores.
4. Derecho a tener sus propios valores, opiniones y creencias.
5. Derecho a tener sus propias necesidades y que éstas sean tan importantes como las de los demás.
6. Derecho a experimentar y a expresar los propios sentimientos y emociones, así como a ser su único juez.
7. Derecho a cambiar de opinión, idea o línea de acción.
8. Derecho a protestar cuando se es tratado de una manera injusta.
9. Derecho a cambiar lo que no nos es satisfactorio.
10.Derecho a detenerse y pensar antes de actuar.
11. Derecho a pedir lo que se quiere.
12. Derecho a ser independiente.
13. Derecho a superarse, aun superando a los demás.
14. Derecho a que se le reconozca un trabajo bien hecho.
15. Derecho a decidir qué hacer con el propio cuerpo, tiempo y propiedades.
16. Derecho a hacer menos de lo que humanamente se es capaz de hacer.
17. Derecho a ignorar los consejos de los demás.
18. Derecho a rechazar peticiones sin sentirse culpable o egoísta.
19. Derecho a estar solo aun cuando otras personas deseen nuestra compañía.
20. Derecho a no justificarse ante los demás.
21. Derecho a decidir si uno quiere o no responsabilizarse de los problemas de otros.
22. Derecho a no anticiparse a las necesidades y deseos de los demás.
23. Derecho a no estar pendiente de la buena voluntad de los demás.
24. Derecho a elegir entre responder o no hacerlo.
25. Derecho a sentir y expresar el dolor.
26. Derecho a hablar sobre un problema con la persona implicada y en los casos límites en los que los derechos de cada uno no están del todo claro, llegar a un compromiso viable.
27. Derecho a no comportarse de forma asertiva o socialmente hábil.
28. Derecho a vulnerar, de forma ocasional, algunos de los derechos personales.
29. Derecho a hacer cualquier cosa mientras no se violen los derechos de otra persona.
30. Derecho a tener derechos
31. Derecho a renunciar o a hacer uso de estos derechos

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Permiso!. No deseo meterme en sus cuitas, ni platicar sobre los 31 derechos asertivos, o el singular derecho a recibir o no ayuda, y si esta debe de ser desinteresada o a cargo del presupuesto. Perdonen que no opine, sino sólo comentar, que en mi caso, me valgo con el derecho y obligación a ser lo más independiente posible y a intentar –en la medida de lo posible- no depender de nadie, que hoy en día más que un derecho es una gracia, sólo una.

Pero a lo que iba, me ha llegado sobremanera tu crítica de una película que a mí me gustó demasiado poco, y de la cual recuerdo menos, pero tu crítica escrita como Bhavya (nunca sé dónde va la h), me ha llamado poderosamente la atención, pues me has hecho entender coas que han pasado por mi vida como incomprensibles y que ahora las entiendo perfectamente, incluso creo entender sus posibles remedio. Te hablo sobre situaciones que he vivido -reelacionada con el amor- en carne propia o más a través de otras (generalmente amigas) en la que efectivamente el Amor como motor de vida crea adicción, y si encima no es correspondido crea “mono” –totalmente de acuerdo- acabando en todo tipo de patologías socio psicológicas. Es verdad que hay personas que necesitan estar enamoradas, que se entregan en demasía para facilitar la obtención del ser amado, que por ello se rebajan a entregar limpiamente su corazón al ser amado, aquel que a la postre será quien lo devore sin piedad (y a veces en tiempo record), dando pasos a grandes periodos de depresión en los que la única salida es, otra vez, el motor del amor, o el enamoramiento –como vos bien dices-, esperando que un clavo quite otro clavo, pero ¿esto es acaso soportable en el tiempo, aunque te encuentres enajenado de amor?

Ahora bien el amor místico, que al no poder ser correspondido ni dañado por el ser del amor amado, entiendo que este amor -por imposible o como el platónico- ni crea mono ni daño, por lo tanto no debe ser patológico. Quizás lo importante es amar sin esperar nada, y si encima lo recibes, pues lo de siempre: miel sobre hojuelas. O quizás lo ideal sea alguien que te ame sin esperar nada a cambio, desinteresadamente…. ? ??? ??? ?

Sobre "A los que aman"

Interruptor dijo...

Pedazo de reflexión has escrito y encima sabiedo que te ha gustado mi crítica. Me he animado a publicarla en otra entrada de este blog y allá en un comentario te comento más.
Gracias anónimo.